martes, 23 de julio de 2019

Mi abuelita

Jorge Montoro al lado de su madre



Mi abuelita se llamaba “ZOILA VICTORIA”, o acaso “soy la victoria”.


El Dr. Eric Berne, en su libro “¿Qué dice usted después de decir “hola”?”, explica a sus lectores la razón de que muchos padres pongan determinados nombres a sus hijos:

“No hay duda de que en muchos casos los nombres, abreviaturas, apodos o sobrenombres que se dan o imponen al inocente recién nacido son una clara indicación de a dónde quieren sus padres que vaya...” (1).

En el caso de mi abuelita, sus dos nombres, que más sugieren ser la frase de un emprendedor, según mi parecer, indican que mis bisabuelos tenían la intención de que sea victoriosa en la vida y así lo fue.



(1) Berne, E. (1994), ¿Qué dice usted después de decir “hola”?.  Barcelona: Grijalbo. P. 95.